La noche es el peor enemigo de la conciencia,
el mejor aliado para la memoria.
Esto se vuelve más inútil que
un bolígrafo sin papel,
que un papel sin tabaco
y que un cigarro sin algo que recordar,
algo tormentoso que muera entre el humo...
No me asusta la derrota,
no me asusta el adiós:
me asustan las sábanas frías
y las horas de añoranza infinitas,
me asusta tu mirada perdida
y tu voz decidida.
No me asusta que no estés,
no me asusta que no vayas a estar,
me asustar pensar que nunca has estado.
Me asusta no verme reflejado
en ningún cristal,
me asusta el miedo y me asusta
la idea de no conocer nada más.
No me asusta tu ausencia,
solamente me tiene aterrado.
Pour toi, pour moi,
parce que le monde est notre,
ou pourrai être si tu veux ça.
Si on reste ici,
où est-ce qu'on ira?
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